En nuestro país Venezuela la vida ciudadana la integran cinco poderes con funciones que deberían ser de autonomía de acción propia, es decir sus decisiones con total independencias y atendiendo a lo expresado en la Constitución, leyes y reglamentos de la República. Los cinco poderes son: El Ejecutivo. Legislativo. Judicial. Electoral y el Cuidadano. Ahora bien el papel todo luce perfecto, pero en la práctica no lo es y esto es debido entre otras razones, a las imperfecciones de un modelo que no sabemos cómo llamarlo, porque está plagado de un desorden muy lejos de la democracia y el irrespeto a la ciudadanía. Por fortuna para el Venezolano demócrata después de 16 años de los cinco poderes, rescatamos uno el Legislativo, duro batallar contra el ventajismo rojo, no es lo suficiente pero por algo debemos comenzar. Cuando nos proponemos construir un nuevo edificio, empezamos por limpiar el terreno y colocar la primera piedra y después buscar los fondos necesarios para la construcción. Esto es un ejemplo de que vamos por un camino cierto pero seguro.
El próximo 5 Enero con la voluntad de una actitud democrática las nuevas autoridades parlamentarias, tendrán la oportunidad de poner orden en el hemiciclo Legislativo, dejar a un lado la política partidista y las complacencias al poder Legislativo. La Asamblea Nacional dejara de ser un organismo dependiente de las directrices emanadas de la Presidencia. Las leyes habilitantes fueron una pésima experiencia que sólo sirvió para darle poderes extraordinarios a una persona que no se ocupa de sus propios deberes y pretendió usurpar las funciones de otros. En lo sucesivo habrá puertas abiertas a periodistas en las sesiones de la Asamblea, eliminando el ventajismo de permitir la entrada en el palco de arriba a personas del mal vivir y saboteadores afectos al gobierno, quienes vociferaban palabras obcenas cuando intervienen los opositores. Hubo en el pasado muchas agresiones personales y hechos de heridos, recibiendo la peor parte, entre otros los diputados Julio Borges, María Corina Machado, William Dávila.
El rescate por la vía democrática de la Asamblea Nacional que parecía haberse perdido la esperanza es uno de los mayores logros de los últimos 16 años. Tanto ventajismo propagandístico, un CNE a merced de las exigencias del gobierno, los funcionarios públicos amenazados con separarlos de sus cargos, si votaban en contra del gobierno. Todo presagiaba que el triunfo del gobierno avalado por el fraude les pertenecía. Sin embargo las principales encuestadoras del país daban un triunfo contundente y seguro a la Unidad democrática. El coordinador de la campaña del gobierno con mucho ventajismo hacia los simulacros de votación para hacer su campaña política y hasta se burlaba diciendo este es el mejor sistema y el más moderno del mundo, imposible de que el bando opositor haga fraude, pero resulta que quienes manejan las máquinas escrutadoras y podían hacer fraude era el propio gobierno. La ejecución del fraude estaba en el ambiente. La avalancha de votos jamás visto en una elección privó de la maniobra y el primer sorprendido fue el propio CNE, tuvieron que aceptar la derrota y para no dejar dudas fue por PALIZA, lo demás es historia.
La próxima elección será el rescate del poder Ejecutivo para poner la casa en orden y que los demás poderes recuperen su autonomía y actúen de forma imparcial en concordancia con el ordenamiento Constitucional. Podremos punto final a la era represiva a los presos políticos y a ciudadanos honestos que están pagando con Cárcel actos que no han hecho. Los próximos mandatarios no se les permitirá usurpar otros poderes y no permitirles perpetuarse en el poder.Escrito por Lindolfo perozo
email perozo.lindolfo@gmail.com
No comments:
Post a Comment